Poesía

El otro número PI.

Trece, catorce y, ¿dieciséis? Tal vez.
Llega el día, la hora propuesta, la consigna
y todo el mundo a amar; y el que no ame,
volverá a la circunferencia que lo instiga
como un punto más de los que hoy caen.

¿Cómo quedará el centro después del golpe?
A sazón de qué febrero volvería a ser la gravedad
que nos releve del puesto fronterizo a otro orden
sin contrapeso, a esa esfera en la que se pueda girar
como un loco en su locura sin sensatez que estorbe.

Que ningún orate merece el eje de su candidez
sin el cabal fundamento de su circular ingenio,
los prudentes musitan: trece, catorce, y dieciséis.

¿Cómo quedaría el golpe después del centro?
Cómo el aire que respiras, o como el viento.